17 de Mayo, Día Mundial de la Hipertensión

La hipertensión arterial es un problema de salud que afecta a más del 25-30% de la población, de los cuales un número importante de personas no están tratadas y de aquellas que reciben tratamiento más del 50% no tienen las cifras de tensión controladas.

La hipertensión es uno de los principales factores de riesgo para las enfermedades cardiovasculares, como el infarto de miocardio, los accidentes vasculares cerebrales, la insuficiencia cardiaca, entre otras.

Las personas con diabetes son un grupo con mayor riesgo a presentar hipertensión arterial.  Más del 80% de los sujetos con diabetes tipo 2 tienen  hipertensión y además por lo general necesitan mayor número de medicamentos para normalizar las cifras de tensión.

Dado que también la diabetes es un importante factor de riesgo de enfermedades cardiovasculares, su asociación con hipertensión claramente multiplica este riesgo.

Casi la mitad de las personas con hipertensión no está diagnosticada porque no sabe que tiene la presión arterial alta. La hipertensión generalmente no da síntomas, por eso es necesario que todos los adultos midan su presión arterial con regularidad y conozcan sus cifras.

Tenga en cuenta lo siguiente:

  • Las medidas para prevenir la hipertensión pasan por reducir el consumo de sal, tener una dieta balanceada y saludable, evitar el consumo nocivo de alcohol, no exponerse al humo del tabaco o sus derivados y mantener un estilo de vida físicamente activo y un peso corporal saludable. 
  • La hipertensión puede ser controlada –por debajo de 140/90– con modificaciones en el estilo de vida, siguiendo las indicaciones de los profesionales de la salud y con medicamentos eficaces y seguros, que además son de muy bajo costo y están incluidos en el POS.
  • El tratamiento ayuda a controlar la presión arterial pero no cura la hipertensión. Si se abandona el tratamiento, la presión arterial volverá a aumentar por encima de 140/90 y con ello el riesgo de complicaciones cardiovascular.

También es importante destacar, que la presión arterial puede llevar a muchas afecciones médicas. Estas incluyen enfermedades del corazón, accidente cerebrovascular, insuficiencia renal, problemas en los ojos y otros problemas de salud.