Día Internacional de la Acción contra el Sida

*En la actualidad 15 millones de personas tienen acceso a tratamiento contra el VIH.

El Día Internacional de la Acción contra el Sida se conmemora el 1 de diciembre de cada año, y se dedica a dar a conocer los avances contra la pandemia de VIH/sida causada por la extensión de la infección del VIH.

En Costa Rica la prevalencia general de VIH es de 0,1% y es caracterizada como una epidemia concentrada. Según estimaciones de ONUSIDA (2013), la tasa de prevalencia de VIH en personas mayores de 15 años es de 0.3% (aproximadamente 9,800 personas mayores de 15 años con VIH).

Las tasas de notificación de VIH han incrementado de 8.6 a 14.8 por 100,000 habitantes de 2002 a 2013. El 80% de los casos son de casos de hombres y el grupo de edad con mayor cantidad de registros es el de 15 a 49 años, aportando el 84.3% del total de diagnósticos para el período. Las tasas de mortalidad se han estabilizado con un promedio de 2.9 por 100,000 habitantes en el mismo periodo.

Por otra parte, el 80% de los casos notificados de VIH/sida y las defunciones, son del sexo masculino. El grupo de edad en donde se presentó la mayor cantidad de defunciones fue en el de 25 a 59 años.

El mundo está adoptando la estrategia de Respuesta Rápida para poner fin al SIDA. Para erradicar esta epidemia hacia el 2030 en el marco de los Objetivos de Desarrollo Sostenible se necesitará acelerar la inversión, el compromiso y la innovación, según señalan las autoridades de las Naciones Unidas.

Según ONUSIDA, la estrategia de Respuesta Rápida incluye:

  • Inversiones anticipadas.
  • Centrarse en los lugares, poblaciones y programas que tienen mayor impacto.
  • Catalizar la innovación para la gente que más lo necesita.
  • Involucrar a líderes locales en respuestas específicas, sostenibles y responsables.
  • Crear nuevas alianzas.
  • Mantenerse firme en cuanto a los derechos humanos.
  • Lograr resultados sin dejar a nadie atrás.

 

Costa Rica es el único país latinoamericano en el cual el Estado brinda la seguridad social, asegurando la calidad de vida de la persona con VIH/SIDA mediante el tratamiento fundamentado en el estado clínico y la carga viral de la persona para el inicio del tratamiento con Antirretroviral (ARV).